El edema se produce por la acumulación de líquidos en los tejidos, especialmente en pies, tobillos y manos.
El 75% de las mujeres embarazadas sienten hinchazón o retención de líquidos en las piernas, especialmente en el último trimestre.
Durante los últimos meses de embarazo, el bebé aumenta su peso y obliga al útero a ensancharse. Esta presión afecta directamente a las venas ubicadas en la pelvis y a la vena cava, la cual transporta la sangre desde las piernas hasta el corazón. Esta presión hace que el retorno venoso sea insuficiente y provoca la retención de líquidos y la sensación de piernas cansadas.
Ocurre con mayor frecuencia en embarazos múltiples, exceso de líquido amniótico o problemas de hipertensión.
El edema suele empeorar al final del día y con el calor del verano.
Consejos para prevenir el edema
- Elevar los pies siempre que se pueda
- Acostarse sobre el lado izquierdo
- Actividad: natación, caminar, Pilates especial para embarazadas
- Masajes específicos para la circulación
- Gimnasia circulatoria
- Duchas diarias de contraste
- Beber mucha agua
- Alimentación equilibrada
- Evitar prendas ajustadas
Cuándo acudir al médico
Es imprescindible acudir al médico en caso de que el edema afecte al rostro y vaya acompañado de los siguientes síntomas (señales propias de la preeclampsia):
- Inflamación repentina en tobillos, piernas o manos
- Visión borrosa
- Mareos o dolores de cabeza
- Dolor en abdomen
Si la hinchazón es muy fuerte el médico puede indicarte el uso de medias de compresión especiales para embarazadas.
Si consideras que tu edema entra dentro de lo normal pero quieres mejorar tu calidad de vida:coge cita para tu fisioterapeuta u osteópata especialista en embarazadas.